 |
El Cristo en la Cruz del Maestro de San Francisco (Ombría,
hacia 1280) muestra un crucificado anatómicamente anormal. Las distorsiones
(estiramiento de los brazos) muestran un sufrimiento intolerable. La Virgen
está afligida pero en calma (los textos no hablan de desmayo). Su
confianza, su abandono, están traducidos en los pliegues bastante
simples. En San Juan, el drapeado es más movido : este traduce el
movimiento (el gesto en la mano que muestra la emoción). |